5 de mayo de 2021: resaca electoral, terremoto político. La inconmensurable ascensión y consolidación de una clara figura victoriosa: Isabel Díaz Ayuso. Ni en los mejores pronósticos, ni en las mejores encuestas se les daba una victoria tan infalible, tan incontestable, tan holgada frente a las demás fuerzas políticas del tablero democrático.
Mucho le debe el Partido Popular a Isabel Díaz Ayuso y más después del batacazo catalán un partido muy dañado sale reforzado con un golpe maestro de Isabel, la cual ha sido atacada atrozmente por toda la izquierda mediática, política e ideológica. Sin tregua, sin pausa, era el objetivo a batir, I.D.A., loca, inconsciente, psicópata, trumpista, irresponsable… todo tipo de descalificaciones, ataques constantes, improperios, injustos y vergonzosos de quienes promueven un feminismo de salón, falso, pancartero y ridículo… Isabel Díaz Ayuso ha sido capaz de resistir con valor los ataques constantes y feroces hacia Madrid, hacia sus ciudadanos por parte del gobierno Sanchista para minimizar el principal foco de oposición que tiene este Gobierno, para usar a Madrid para contentar a un independentismo rancio y casposo pero fundamental para el PSOE durante toda la legislatura.
La dirigente popular se ha postulado como lideresa del espacio político de centro derecha nacional resistiendo una moción de censura traicionera por parte de la izquierda y de Ciudadanos (que no se olvide), resistiendo a diversos ataques mediáticos, institucionales, propagandísticos… hasta se intentó judicialmente parar la máxima expresión de un pueblo: las urnas. Rescatando a un Partido Popular en horas bajas no, en horas abisales, después de un nefasto resultado en Cataluña. Ella ha sido la que ha afianzado la reagrupación del electorado de centroderecha con la absorción del electorado decepcionado y mucho de Ciudadanos (y con razón), ella es quien ha levantado un Partido que tenía a su electorado muy desmotivado y nada incentivado.
Por si fuera poco, Isabel Diaz Ayuso ha llevado a la nada política a una de las figuras más nefastas de la historia democrática española, Pablo Iglesias Turrión, retirándole de la política y desterrándolo del juego democrático nacional (que alivio…) Además, ha dado un duro golpe al gobierno Sánchez el cual a mi parecer va a intentar aguantar y no convocar elecciones a corto plazo, lo cual sería muy contraproducente para ellos. Ha propinado un duro golpe a la izquierda mediática, panfletaria a los Cintora, Wyoming, Ángels Barceló, la nefasta Isobaras, al afiliado Tezanos, el cual dirige un organismo público financiado con el dinero de todos como el CIS el cual se utiliza para incentivar o desincentivar el voto con fines partidistas y electoralistas de manera inmoral y antiética.
La Dama de Hierro a la española ha sido quien le ha asestado un duro golpe al infalible y todopoderoso Iván Redondo, el hombre de la calculadora mágica, al lobby sindical que se manifestó a las puertas del un hospital como el Zendal construido en época de pandemia sin embargo dicho colectivo se quedó callado en Valencia frente a la chapuza del hospital de campaña de Puig. La lideresa madrileña es la que ha asestado un duro golpe a los políticamente correctos, a los del doble rasero, a los del Bildu, PODEMOS y ERC sí, pero VOX no, a los que se postulan como demócratas, pero condenan dictaduras de un signo y no de otro. A los que se ponen la etiquetas de demócratas exclusivos dejando fuera a los que no piensan como ellos. A los maravillosos, a los únicos, a los que son como todo el mundo ha de ser y si no eres así eres malo, malvado, muy malvado…. Frente a esto, una campaña centrada en la libertad, libertad fiscal sin asfixias, libertad de emprendimiento, libertad individual, libertad cultural, libertad de no ser políticamente correcto, libertad de elegir en una sociedad diversa y plural. Libertad frente al control, frente a lo cool frente a la rancia lucha de clases, frente a lo que “hay que ser” según algunos.
Un auténtico revés institucional, mediático, postulando al PP como alternativa viable y factible a la Moncloa. La izquierda debe replantearse que país quiere y analizar sociológicamente la estructura y composición de la sociedad española para saber que en política no todo vale. Que sobre todo atacar a la capital de un país a diestro y siniestro tiene su precio. Meter a un partido como Podemos en el gobierno tiene su precio y pactar los PGE con partidos tan radicales como Bildu y ERC tanto en lo económico como en lo territorial también tiene su precio. La asfixia fiscal, la propaganda, el contar cuentos bonitos no es tal ventaja la gente quiere y busca respuestas, la gente quiere y busca realidades no ficciones, salir adelante con una pandemia dura, muy dura, negocios cerrados, gente sin trabajo desesperada, sin salida, la gente quiere actos no ficciones y en Madrid se ha entendido muy bien. En una campaña donde el eje principal la campaña y calado y vaya si ha calado…
El futuro desvelará mas escenarios, VOX es la tercera fuerza política del país puede gustar o no, eso es indiferente e irrelevante, pero su electorado tiene derecho a tener representación institucional como la tuvieron Ciudadanos y Podemos en su momento. Cabe recordar que Podemos encabezó gobiernos de la trascendencia de Barcelona, Madrid, Cádiz, Santiago, etc. Nadie se rasgó las vestiduras, ningún medio dijo que se iba a acabar la democracia y la convivencia. La democracia de mayorías funciona así y cualquier sensibilidad tiene el mismo derecho si alcanza una cifra considerable a tener una representatividad institucional proporcional si el escenario se da. El cambio se gesta en Madrid y la importantísima reunificación del centro derecha de tantos reivindicamos también.
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