La Biblia, un libro sin igual

En República Dominicana no solo tenemos el libro de libros en el escudo de nuestra bandera, sino que cada 27 de septiembre, celebramos el Día Nacional de la Biblia, estipulado en la ley 204-84. Odiado por muchos, amado por tantos más, es un libro único que aporta valores universales de convivencia y civismo. Un libro de amor, que busca reconciliarnos con Dios, que afirma el valor de la familia, que reivindica a la mujer y que nos trae esperanza y salvación.

La Biblia no es un libro ni católico ni evangélico, es el libro de Dios, aunque es innegable la contribución de la Iglesia Católica en la Biblia que tenemos hoy en día. Sin embargo, el trabajo continúa, pues más de 3000 traductores de todas las denominaciones trabajan en ella actualmente para hacerla más comprensible al lenguaje actual y para hacerla llegar a más personas en miles de idiomas y dialectos.

Por ser un día conmemorativo quiero dejaros algunos datos relevantes sobre La Biblia. Este libro sagrado fue escrito hace 1600 años aproximadamente y lo fueron editando más de 60 generaciones. Dentro de los autores, la cantidad de personas que participaron fueron más de 40. Entre los diferentes tipos de personalidades, los hubo de diferentes clases sociales. Desde reyes, pasando por pescadores, campesinos, filósofos, poetas, eruditos, estadistas, comerciantes, comerciantes, militares, rabinos, cobradores de impuestos y hasta un médico.

La Biblia, además, fue escrita en diferentes espacios ambientales, todos completamente diferentes. Unos llegaron a escribirla en pleno desierto, otros en cárceles, incluso los había que se dedicaban a escribirla mientras viajaban. Las épocas históricas también influyeron a la hora de redactarla ya que se pudo escribir en tiempos de guerra, pero también de paz. 

Los continentes también serían protagonistas de este libro sagrado. Llegó a escribirse en continentes con culturas tan distintas como Asia, Europa o África. El idioma, que es ese instrumento con el que nos comunicamos todos, también sería un factor importante para poder transmitirla. La Biblia sería escrita en sus inicios en tres distintos: hebreo, arameo y griego. Otro dato a destacar tiene que ver con la visualización de este libro, ha sido el más leído al mismo tiempo que el más publicado en toda la historia desde que se realizan este tipo de contenidos. No hay comparación con otro.

El primer libro que se publicó fue la Vulgata latina, impreso en la prensa de Gutenberg entre los años 478 y 480, aproximadamente. Además, la Biblia fue la pionera que se tradujo. La Septuaginta, traducción griega del antiguo testamento hebreo. Hablando de la Vulgata latina, existen 800 manuscritos de este tipo, 1000 de otras versiones primitivas, 400 manuscritos griegos, 1300 copias y manuscritos del Nuevo Testamento.

Otra de las cosas fantásticas de la Biblia está en que ha sobrevivido al fuego y al odio de los hombres que se sienten bajo su escrutinio cuando esta les señalaba el pecado que se resisten a abandonar. Es por eso que la aborrecen y hasta el día de hoy, es el símbolo más odiado por el progresismo. La Biblia vive bajo el constante ataque de la izquierda que, si por ellos fuera, desaparecería de cualquier biblioteca o librería. Sin embargo, con el Corán no poseen esa mentalidad, ese manuscrito sí que lo veneran. Hace tiempo Voltaire manifestó el siguiente mensaje: “Después de mi muerte, la Biblia pasará a la historia y nadie la volverá a publicar”. Después de la muerte de Voltaire, su imprenta y la casa en la que vivían fueron compradas por la Sociedad Bíblica de Ginebra. ¡Qué irónico!

En fin, todo es una señal clara que la Biblia como tal es capaz de resistirlo todo, incluyendo el ataque del progresismo. Todo ello conllevará a que este seguirá siendo ese libro transformador que trae esperanza y salvación al mundo hoy.

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