El reino de Marruecos está situado en el extremo noroeste del continente africano, bordeado por el mar Mediterráneo al norte y el océano Atlántico al oeste. La economía del país del magreb es próspera , no obstante el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, se la está facilitando incluso más y sin saber por qué.
Si nos remontamos a años atrás, en el 2019, en una visita de Estado celebrada en la capital de Marruecos a la que acudieron Sus Majestades los Reyes y algunos ministros de la delegación como Josep Borrell, Fernando Grande-Marlaska, Luis Planas y otros miembros, se firmaron una serie de acuerdos bilaterales como la donación a Rabat del Gran Teatro Cervantes de Tánger, un memorándum de entendimiento sobre el establecimiento de una “Asociación Estratégica Global”, otro para el desarrollo de una tercera interconexión eléctrica y alguno que otro más.
Sí, por esas fechas, comenzaron a fluir cantidades ingentes de dinero para los de Marruecos. Más que una supuesta alianza con el país vecino parecía un contrato de matrimonio blindado entre Pedro Sánchez y el actual Rey de Marruecos, Mohamed VI. A pesar de que tal posicionamiento nos repercuta negativamente en nuestras relaciones internacionales con Argelia. Además en esos periodos, España obsequió a Marruecos 384 vehículos que tuvieron un valor de 26 millones de euros.
Entre estos, caben destacar vehículos 4×4 por 15,8 millones, 100 pick up por 5,5 millones, 10 camiones cisterna con valor de 1,32 millones, 18 camiones 4×4 plataforma por 2,61 millones y 8 camiones frigoríficos por la friolera cantidad de 600 millones de euros. Teniendo en cuenta que nuestra Guardia Civil tiene 380 coches eléctricos guardados en una nave de Alcalá de Henares por falta de cargadores y que se regalen toda esa cantidad de vehículos resulta incomprensible. Pero seguimos ya que esto no cesa. Ese mismo año se entregaron incluso 190 millones de euros para la construcción de infraestructuras y otros 150.000 millones al fondo de seguridad física nuclear de Marruecos.
Nuestros vecinos, parece que a pesar de recibir todo esto, no tenían suficiente, ya que, en diciembre de 2020, nuestro Gobierno compró otros 130 vehículos por 8 millones de euros y cámaras térmicas por 8,8 millones. Y todo esto teniendo en cuenta que la mitad de nuestros guardias civiles carecen de chalecos antibalas. Pedro Sánchez tiene una relación más que sorprendente con Mohamed VI. En el año 2022, al Monarca le realizó un ‘préstamo’ por 20 millones de euros. A esto hay que añadirle el riego de millones por frenar la inmigración irregular que no parece que resulte demasiado efectiva ya que siguen llegando muchos irregulares desde nuestro país vecino. Pero no pasa nada.
En España, la Organización Agraria Unión Extremadura lucha contra el derribo de la presa de Valdecaballeros, ya que su agua es necesaria, más en las situaciones de sequía que estamos pasando. Sin embargo, Sánchez a lo que se dedicó es a aprobar una concesión de un crédito por valor de 5 millones de euros a la Oficina Nacional de Electricidad y Agua Potable de Marruecos para la construcción de dos plantas potabilizadoras.
Y por si los agricultores españoles no tenían suficiente, las ayudas del Gobierno a nuestro país vecino del sur acaban amenazando el futuro del olivar por la reducción del Tajo-Segura, ya que el recorte del caudal produciría una pérdida de 5000 puestos de trabajo además de 27000 hectáreas de cultivo. Parece que Sánchez ve más coherente inyectarle a Marruecos 115 millones para su agricultura en vez de para, por ejemplo, el olivar de la provincia de Alicante, el cual tiene, en la actualidad, grandes pérdidas económicas.
El Consejo de Ministros además aprobó una partida millonaria a una empresa de origen magrebí llamada Jaida S.A. vinculada al Gobierno de Marruecos y a su Rey Mohamed VI, adjudicación labrada a espaldas del Congreso de los Diputados y a sus socios de Gobierno, Unidas Podemos. Mientras, Rabat parece que se está rearmando, ya que han adquirido los lanzamisiles más avanzados del mundo además de los proyectiles de mayor alcance para sus sistemas HIMARS (High Mobility Artillery Rocket System). Hablando de protección, en España, nuestro escudo antimisiles, en comparación con la nueva adquisición del país vecino, está lejos de ser insondable. Tras todo esto, la pregunta que yo me hago es la siguiente, ¿por qué tal incremento de ayudas a Marruecos? ¿Qué fin tienen y por qué motivo se hacen?
Pedro Sánchez no lo niega. Su deseo es “estrechar aún más esta relación de amistad” con Marruecos. Parece que nuestros vecinos tienen controlado al Jefe del Gobierno, incluso en el último Parlamento Europeo, 17 eurodiputados tuvieron que votar en contra de las investigaciones a Rabat por su papel en el Catargate y también por su espionaje por el Pegasus, tras una llamada recibida por el ministro de Asuntos Exteriores de Cooperación Africana, Nasser Bourita.
La verdad no sabemos si todo esto tiene relación con los 2,6 gigas de datos que extrajeron del móvil de Sánchez, a pesar de que se trata de un dispositivo de alta seguridad fabricado por el CNI, sin embargo, lo que mayormente queda patente es que Marruecos se ha convertido en un pozo sin fondo para España. Nuestro presidente del Gobierno parece más preocupado por el país vecino que por los propios españoles, pero, como dijo el escritor y filósofo francés, Edmond Thiaudiére, “la política es el arte de disfrazar de interés general, el interés particular”.
Es algo incomprensible