El Club Deportivo Mirandés, en la presentación oficial del equipo, ha cosechado su primera victoria de pretemporada, ganando por 1-0, ante el Real Valladolid. El gol lo marcó Guayo, jugador del filial rojillo. Sin lugar a duda, esta victoria era más que necesaria y más siendo en casa y contra todo un conjunto pucelano que dio la cara ante un rival, a pesar de haber descendido esta temporada de la Primera División.
De nuevo, Anduva volvió a brillar. La entrada al estadio se asemejaba a la de un partido liguero. La afición siempre fiel. Esta vez acudieron a apoyar a los rojillos aproximadamente 1525 espectadores. Es verdad que el dominio lo tuvo el Valladolid, en mayoría de las ocasiones, incluso las tuvo como para llevarse algo positivo de Anduva. Sin embargo, al final del partido, el Club Deportivo Mirandés venció por la mínima.
En el encuentro se pudo ver más de cerca a los jugadores. La portería rojilla está más que asegurada con Ramón Juan, incluso con el otro cancerbero recién fichado, Luis López. Ambos guardametas de garantías tendrán que competir el uno con el otro para ganarse el puesto, aunque no sería descabellado que Lisci los rote durante la temporada.
El Mirandés va cogiendo forma, aunque la nota negativa, en esta ocasión, viene por parte de Diogo Verdasca que, en su primer entrenamiento, se lesionó, complicación con la que el míster rojillo no contaba. No obstante, el Mirandés está peinando el mercado para poder seguir formando una plantilla de garantías.
El próximo partido de preparación enfrentará a los rojillos contra el Osasuna Promesas. Este rival, a pesar de resultar a priori muy complicado, no deja de ser un filial que, seguramente, esté bien organizado. La nota curiosa se encontrará en que, el jugador rojillo Michelis, que está cedido por el Mirandés en el filial osasunista, puede acabar jugando contra su equipo. ¿Ocurrirá? ¡Quién sabe!
Tan solo quedan dos encuentros de preparación para terminar el periodo de pretemporada: el primero, el citado anteriormente, contra el filial de Osasuna y el que los rojillos disputarán contra la SD Logroñés. A pesar de ello, el trabajo intenso seguirá corriendo a cargo de las oficinas en las que trabaja el director deportivo, Alfredo Merino, que sigue buscando refuerzos para complementar el trabajo del entrenador con el equipo.
Aun no ganando más que solo un partido en pretemporada, no está siendo mala la experiencia del Mirandés, pero como todos los equipos, siempre se debe encajar bien las piezas para poder así confeccionar un equipo de garantías. El objetivo es más que claro: lograr una salvación tan holgada que sirva para mejorar los resultados cosechados en la temporada anterior. El Mirandés puede seguir evolucionando. Año tras año, el equipo siempre da la cara en la categoría de plata y eso es lo que cuenta.
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