Todo se ha podido saber debido a una investigación del Colectivo de Víctimas del Terrorismo en el País Vasco, COVITE. Bildu, objetivamente hablando, lleva en sus listas para las elecciones de este 28 de mayo, a 44 condenados por haber pertenecido a la banda terrorista ETA, 7 de ellos cuentan con asesinatos a sus espaldas. Sí, delitos de sangre, cosa que no es moco de pavo. El partido abertzale, que tanto pretenden blanquear los del PSOE como Podemos e independentistas en general, tras estas investigaciones, ha quedado en evidencia. Ya veremos durante estos días las excusas absurdas que se traen los diferentes activistas de izquierdas para poder defender los intereses abertzales que a su vez van unidos a los del Gobierno de Coalición.
En honor a la verdad, la acción de llevar a individuos de ese encaje resulta legal, pero también completamente inmoral. Puedo entender y entiendo que deba existir una manera de ver el mundo, aunque no sea similar al que yo quiero, otra muy distinta que dentro de esa filosofía metan a ‘profesores’ que han ido asesinando o participado en nombre de una banda terrorista. La sociedad española no se merece semejante castigo de igual modo que tampoco los votantes independentistas que, a pesar de buscar la independencia de lo que ellos llaman Euskal Herria, siempre fueron contrarios a las actividades de ETA. ¿Serán muchos o pocos? Ni idea, pero si algo tengo claro es que todo no vale, señores de Bildu.
Yo soy partidario de que, en periodos de democracia, existan diferentes corrientes ideológicas, desde la falangista hasta la comunista pasando por los nacionalismos, aunque ni los unos ni los otros lleguen a ser de mi agrado. Cierto que es necesaria una formación abertzale debido a que, aunque no nos guste, son muchos los que se sienten representados con el nacionalismo vasco de izquierdas, al igual que sucede con el de derechas (PNV). No obstante, hay unas líneas rojas que jamás se deben cruzar y para mí, desde luego, una de ellas es la de incorporar a personas que cuenten en su haber con delitos de sangre. Más, si entre ellos se encuentran individuos que han arrebatado la vida a alguien. Insisto en lo que dije en el párrafo anterior: quiero creer que personalidades que antaño votaron a Eusko Alkartasuna, Ezker Batua o Aralar van a mostrar su malestar con que se incluyan nombres de terroristas en listas por la coalición de EH Bildu. Igual resulto ser un soñador… pero creo que, hasta dentro de los independentistas, habrá gente razonable, aunque sean contados con los dedos de una mano.
Por redes sociales o en artículos de opinión, siempre he manifestado, y sigo en mis trece, que Bildu es el Unidas Podemos a la vasca o, lo que es lo mismo, que Unidas Podemos es el Bildu a la española. Ambas son coaliciones y tienen muchos puntos en común entre los que cabrían destacar su odio a España y sus costumbres. Tantos son los parecidos que en pocas ocasiones veremos cómo la una ataca a la otra, a la vez que podemos contemplar como ambas extremas izquierdas defienden a capa y espada el tan absurdo como inculto lenguaje inclusivo, de igual modo que lo hace el PSOE, todos ellos atentando así contra nuestro idioma tan popular como enriquecedor. Por cierto, no pierdo la esperanza de que Arnaldo Otegi, Pedro Sánchez, Pablo Iglesias, Yolanda Díaz, Irene Montero u otros políticos, que se hacen llamar feministas, utilicen el lenguaje de la incultura inclusiva para manifestar que existen: “asesinas y asesinos”; “locos y locas” o “drogadictas y drogadictos”. Para situaciones en negativo, jamás tiran de él; siempre que lo hacen… es en positivo. ¡Qué casualidad!
Ahora es cuando voy a responder, bajo mi punto de vista, a la pregunta del encabezado. Para mí, claro que lo son, pero de manera blanqueada. La única diferencia entre una y otra está en que unos no asesinan y otros sí, pero el temor y la crispación sigue imperando con la diferencia de que gracias a que tenemos un PSOE liderado por un auténtico narcisista dispuesto a otorgar cheques en blanco, no hace falta que estos se dediquen a ejercer las peripecias del pasado.
No hace falta acabar con alguien para ver la inquina que tienen a lo español, no hace falta decir que tienen más libertad de ejercicio simpatizantes de Bildu en Madrid que los que son del PP o Vox en el País Vasco, incluso la persecución que se hace del español por tierras vascas, en donde ahí también uniría a esta ecuación al PNV debido a la imposición de euskera que quieren instaurar. En definitiva, si la coalición EH Bildu quiere dejar su pasado atrás, que empiecen por sacar de sus listas a todos los que han pertenecido a la banda del terror. El violador jamás será exviolador, el asesino tampoco exasesino y quien tenga en su mochila haber pertenecido a ETA… esa misma etiqueta la llevará de por vida.
Periodista bilbaíno a jornada completa, anteriormente locutor en Cadena SER Miranda y al mismo tiempo articulista en diversos medios digitales. Amante del gimnasio y la naturaleza a tiempo parcial.
“Si tú no trabajas por tus sueños, alguien te contratará para que trabajes por los suyos”
-Steve Jobs.
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