
El que fuera futbolista del Athletic Club y Deportivo Alavés, entre otros conjuntos, estuvo presente en los Juegos Olímpicos que se celebran este año en París, siendo seleccionador nacional de la República Dominicana.
Ibai, como jugador, dio muchos momentos de pasión sobre el césped. Formado en la cantera del Santutxu FC, el extremo dio el paso hacia el Deportivo Alavés, donde sus grandes actuaciones le sirvieron para tener la oportunidad de jugar en el Athletic de Bilbao. Vistiendo la camiseta de los leones coincidió con el técnico de Rosario, Marcelo Bielsa, a quien considera su maestro.
El de Santutxu, hasta hace poco, estuvo compaginando su papel de futbolista con el de entrenador, ya que durante mucho tiempo fue el técnico de las categorías inferiores del Santutxu FC. Tras dejar el Deportivo de la Coruña, sondeó otros objetivos más ambiciosos, como el de ser entrenador de fútbol. Su primera gran oportunidad llegó con el juvenil del propio Santutxu, contando como su ayudante al que fuera también futbolista de los leones, Fernando Amorebieta.
No obstante, un día recibió una llamada que lo descolocaría por completo: la de la Federación Dominicana de Fútbol, para tomar las riendas de la selección Sub-23 del país caribeño, que acabó logrando el objetivo de clasificarlos para los Juegos Olímpicos.
A pesar de caer eliminados en París, dieron una buena imagen, ya que tan solo perdieron un encuentro, precisamente ante la Selección Española. Los dos empates que lograron ante Uzbekistán y Egipto no fueron suficientes para proseguir en la eliminatoria. En ambos partidos, los dominicanos empataron a cero.
La selección de la República Dominicana, ante los de Santi Denia, perdió por 3-1. Sin embargo, los de Ibai Gómez jugaron un magnífico encuentro. Aunque la aventura olímpica durase muy poco, el bilbaíno se siente muy orgulloso de sus jugadores porque la competición que hicieron acabó siendo de sobresaliente.
El aprendiz de Marcelo ‘El Loco’ Bielsa todavía tiene mucho que ofrecer desde los banquillos. Ahora, lo único que separa a Ibai de una trayectoria digna como entrenador es continuar adquiriendo experiencia y aprender de las derrotas. Sin duda, las victorias llegarán con esfuerzo y dedicación. Estoy seguro de que el bilbaíno puede convertirse en uno de los entrenadores vascos a seguir, siendo además Euskadi una cantera encomiable de técnicos a la cual puede añadirse su nombre. No me cabe la menor duda de que próximamente tendremos buenas noticias de él.

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