Hace unos años, habrá quien lo recuerde: Pedro Sánchez impulsó una moción de censura con los apoyos que todos conocemos. La excusa fue la corrupción, pero el fin real acabó siendo echar a Mariano Rajoy de un gobierno completamente legítimo. Sus socios que lo apoyaron, los de siempre; Bildu, Podemos y los independentistas catalanes entre otros. La sentencia en dos ayuntamientos de Madrid llegó a ser la causante, la conocida trama Gürtel.
Aunque ustedes no lo crean y a juzgar por la maravillosa apariencia del presidente del Gobierno, el pacto con todos los personajes y formaciones varias, han permitido que este se perpetúe en el cargo y se ve que no le quita para nada el sueño. Sánchez descansa plácidamente en Moncloa y su cara, bien cuadrada aguanta, golpe tras golpe y sin pestañear. No dejo de reconocerlo, parece resistir los golpes como el Real Madrid en Champions League; reponerse y asestar, todo con una precisión maquiavélica golpeando al enemigo.
A Sánchez nada le afecta. Nada parece importarle. A pesar de la nefasta, insufrible y dañina situación en la que ha metido a los españoles, parece tener carta blanca para todo, también para aquellos que le rodean. Aquí nadie dimite, nadie es capaz de asumir los errores, porque quizás, eso significaría reconocerlos. El caso de corrupción que afecta especialmente a Canarias, a pesar de que amenace con extenderse al PSOE a nivel nacional, tampoco parece que tenga pensado dimitir nadie.
El rostro de los socialistas es de hormigón armado, lo aguantan todo. Si la sentencia en dos ayuntamientos valía para censurar al mismísimo presidente Rajoy, un caso de corrupción de tal magnitud, parece que no va a afectar ni a los consejeros de las carteras afectadas, ni tampoco al presidente del Gobierno de Canarias, Ángel Víctor Torres. Ninguno asume responsabilidad alguna.
A muchos en Canarias les podrá parecer gracioso. Oigo al respecto chistes sobre el señor ‘Tito Berni’ como el ‘conseguidor’ en la trama y el señor Curbelo, entre otros diputados socialistas, supuestos visitadores de prostíbulos que acudían a ellos, supuestamente, para mantener relaciones sexuales con jovencitas, abusando de sustancias de todo tipo e incluso de viagra, algo que parece habitual en todos los casos de corrupción socialistas.
Sin embargo, este Gobierno infame, luego en el Congreso de los Diputados, se dedica a votar para abolir la prostitución. Se dan golpes de pecho defendiendo el ‘Feminismo’ y luego nos pretenden dar lecciones a todos los demás. El Ejecutivo más moralista de la historia democrática española, reduce, con sus ineficaces leyes, penas a violadores y pederastas y eso cuando no los excarcelan. También permiten casos de corrupción en los que, las drogas y la prostitución, están a la orden del día. Ellos todavía serán capaces de juzgar el comportamiento de los españoles. La zorra a guardar gallinas.
Estamos gobernados por una mafia, los ERES de Andalucía, entre otros casos de corrupción, lo pusieron en evidencia y el caso Mediador, viene a ratificar que, en primer lugar, el PSOE y sus socios tienen licencia para delinquir, lo que ellos hagan, no tiene trascendencia. En segundo lugar, que los medios están a su servicio y pronto, tal y como ocurrió con los ERES de Andalucía, el caso mediador desaparecerá de los informativos, porque ya han pagado bien con tu dinero para ello. Y en tercer y último lugar, que nadie, ni sindicatos, ni feministas, ni absolutamente nadie, podrá el grito en el cielo convocando una manifestación o será capaz de hacer más ruido del habitual. No es momento para ello, porque al mando, para aquellos, ellos, son de los suyos.
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