Queridos amigos de Minuto Crucial, este mundial ha empezado loco. Demasiado loco. No sólo por el caos de organización y el esperpento de los cataríes, que abandonaron a su selección tras 45 minutos, sino por los resultados de la primera jornada de una fase de grupos que coge salsa.
Las sorpresas negativas son para Alemania, que cayó ante Japón, y Argentina, que sucumbió ante la espectacular selección de Arabia Saudí. Los de Messi se han complicado la clasificación, a pesar del empate entre México y Polonia, pero siguen dependiendo de sí mismos. Los alemanes lo tienen algo más difícil pero les queda jugar contra los dos extremos del grupo: España y Costa Rica.
Flojos, pero cumplidores, fueron Francia, Bélgica, Holanda y Portugal, que sacaron sus compromisos adelante sin demasiada sobriedad, pero al final lo que cuenta son los tres puntos que les ponen en la buena senda hacia los octavos. Sostenidos por sus estrellas pero sin esa autoridad que se le presupone a los favoritos.
Inglaterra ha mostrado sus cartas en esta competición con su goleada a Irán. Sin duda son los claros favoritos de su grupo, y el empate entre Estados Unidos y Gales allana su camino hacia los octavos de final como líderes. Pero aún así, no son la mejor selección de esta jornada.
A falta del partido de Brasil, este honor es para España. Los de Luis Enrique fueron la apisonadora que ilusiona a todo un país y arrasaron a Costa Rica con una goleada histórica. Quizá lo más llamativo es el compromiso de un grupo que hizo lo que todo entrenador sueña: ser competitivo sin mirar el resultado. La Roja sube peldaños para meterse en el grupo de favoritos, aunque lo deberá refrendar.
Y en cuanto a la organización, lo que se esperaba. Estadios vacíos, caos en los controles de acceso y venta de entradas, cañones de aire acondicionado que son más un peligro que una solución, y la sensación de que este mundial es diferente, y no necesariamente para bien. Pero al fin y al cabo es interesantísimo. Y es que no deja de ser un mundial.
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