
Nuestro país se encuentra inmerso en una situación tan compleja como peliaguda. Los responsables que perjudican los intereses de España son los mismos que nos gobiernan de manera muy deficiente. Políticos incompetentes liderados por Pedro Sánchez, quienes afirmaron que nunca formarían gobiernos de coalición con los comunistas de Podemos o pactarían con los Bilduetarras, pero luego lo hicieron. Ahora, el Partido Socialista Obrero Español se ha vuelto mucho más radical que en tiempos pasados. Dirigentes como Largo Caballero al lado de Sánchez se ven como óleo sobre lienzo o poesía en movimiento, con eso lo digo todo.
Desde que la esposa de ‘su Sanchidad’ fue catalogada oficialmente como investigada, los socialistas adoptan discursos beligerantes en los que ponen en tela de juicio la Justicia española. Que si ‘Lawfare’ por un lado, que si el ‘Fango’ causado por los medios de comunicación «al servicio de la derecha» por el otro… y eso lo manifiestan quienes cuentan a su disposición otros tantos que los apoyan por conveniencia, los de opinión sincronizada que no periodistas, aquellos que defienden lo indefendible poniendo aquello en lo que la espalda pierde su nombre, con la intención de que ‘aterrice’ vía Falcon la publicidad institucional hacia sus despachos, además de exclusivas de envergadura. Si es que, ‘su Sanchidad’, lo tuyo no tiene nombre, tanto como los fijos discontinuos de tu querida socia la comunista Yolanda Díaz, motivo por el cual a partir de las líneas siguientes me dirigiré a ti de igual modo que si estuvieras frente a mí.
Sánchez, como político, desde que eres Secretario General del PSOE, has demostrado ser alguien que carece de escrúpulos. Tu palabra vale lo mismo que la nada y decir que el cargo que ostentas te queda grande es quedarse corto. Además, de escritor a “escritor” te diré lo siguiente: Vergüenza me daría poner el nombre a dos obras como Manual de resistencia o Tierra firme cuando lo único tuyo que tienen es la portada con tu rostro. Te lo dice alguien que, a primeros de año, ha escrito 524 páginas de su novela titulada ‘El abismo del placer’. Una cosa es que, como escritor, alguien te ayude, otra muy distinta que te lo hagan todo. Eso demuestra que eres un fiasco como literato.
A esto hay que sumarle el feminismo que procesas, ese del que tanto te jactas, pero que luego eres capaz de poner a tu pareja a los pies de los caballos con la finalidad de evadir la problemática actual que existe en nuestro país para que a su vez se hable de ti en todos lados. ¿Pensando en dimitir en tu jornada de reflexión de varios días? Una persona que es capaz de formar alianzas con lo ‘mejorcito de cada casa’, imposible que se lo plantee, sinceramente. Ilusos aquellos que se lo creyeron, aunque fuera por unos segundos. Tu ego desmedido jamás permitiría que abandones ‘La Moncloa’, únicamente los españoles y, quizás en el caso más extremo, la Justicia serán quienes lo acaben provocando.
Querido Sánchez, permíteme este consejo el cual te doy con total sinceridad desde la discrepancia más absoluta que me generas: alguien que se rodea exclusivamente de palmeros nunca podrá pasar a la historia como un buen político, hecho que siempre te ha preocupado, pasar a la historia… y claro que lo pasarás, pero por tus innumerables mentiras o cambios de opinión y también por aquel comité de experto que anunciaste hace tiempo y que, con el paso del tiempo, acabó demostrándose que nunca existió. Eso es lo que eres, carne del pasado que debemos aguantar sus últimos coletazos en el presente.
No obstante, eres tan egocéntrico, repleto de un afán de protagonismo desmedido que, para evitar que se hablen de los trapos sucios ‘de tu casa’, decides escribir una segunda carta con la intención de revictimizarte. ¿Quiénes piensas que van a darte credibilidad absoluta cuando cargas contra la Justicia o las diversas formaciones de derechas existentes en España? Solo lo harán tres tipos de perfiles: los palmeros, aquellos medios de comunicación de tu cuerda y el hooligan de turno. Nadie más. El primer grupo lo hará con el fin de ganarse tu confianza para poder así aspirar a vivir de la política; véase el caso del exLehendakari, Patxi López, el mismo que hoy defiende tus intereses a ultranza, cuando competíais por ser los líderes del partido, la de zascas que te propinó siendo este tu principal competidor. El segundo, es ese perfil que prefiere actuar como propagandista, porque ejercer como medio independiente no sale tan rentable en estos tiempos tan convulsos, pero recuerda que cuando la gallina de los huevos de oro deje de producir, serán los mismos que te hagan caer en el abismo. Y el tercer y último grupo, no es otro que el de los lunáticos que ven la política como si fuera fútbol. Los ‘suyos’ todo siempre lo hacen bien. Pena, penita, pena.
Asimismo, para concluir con esta misiva particular; mi querido Sánchez, quiero pedirte, desde este espacio llamado Minuto Crucial, que si en un futuro no muy lejano llegas a plantearte escribir una tercera carta, en esa comuniques tu dimisión a la vez que pidas perdón a cada español que se sintió engañado por tus políticas de vendehúmos. No me gusta la ideología que representas y quien me sigue lo sabe, pero soy de los que piensan que antaño, en tu formación política, existieron tipos honestos que seguramente hoy en día se sientan indignados por la deriva a la que has llevado al PSOE. Eso sin contar a aquellos que, no estando entre nosotros, de tener constancia de todas las tropelías y embustes que has cometido en nombre de su partido, se estarían revolviendo en su tumba. Políticos que lo dieron todo durante tantos y tantos años a los cuales dañas su imagen por culpa de vuestras políticas de extrema izquierda; porque sí, os habéis convertido en un Podemos o Sumar, pero con el logo de una mano sujetando una rosa.
Lo dicho, si queda un ápice de dignidad en tu persona haz lo siguiente: dimite, convoca elecciones generales en cuanto se pueda y, sin mentiras ni trapicheos de ninguna especie, acata la decisión del pueblo español, aquel a quien tú representas en la actualidad por tus infundios y no por tu honradez.

Periodista bilbaíno a jornada completa, anteriormente locutor en Cadena SER Miranda y al mismo tiempo articulista en diversos medios digitales. Amante del gimnasio y la naturaleza a tiempo parcial.
“Si tú no trabajas por tus sueños, alguien te contratará para que trabajes por los suyos”
-Steve Jobs.
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