En el día de hoy, tengo pensado hablaros, por medio de este artículo de opinión, sobre una tradición que probablemente hemos adoptado aquellos que, desde niños, comenzamos a ver Aquí no hay quien viva, aquella serie mítica de los 2000 que consiguió marcar una época. Para ser exactos, hay un capítulo dedicado exclusivamente a estas fechas, y no es otro que “Érase una de miedo”.
En este capítulo, Marisa y Vicenta -interpretadas por Mariví Bilbao y Gemma Cuervo- comienzan en el videoclub de Paco. Estando dentro del local, Vicenta le cuenta a Paco y al resto de vecinos que se encuentran cerca, entre ellos Emilio y Josemi Cuesta, que hace tiempo una niña se suicidó en el ático y que, en ocasiones, en el patio se escuchan los lloros y lamentos de ella. Esto provoca que Paco tenga la genial idea de realizar una película de terror, más bien de Halloween, época en la que se basan los hechos, utilizando a los vecinos y basándose, según él, en el método Stanislavski.
Tras manifestar su idea, un complot entre Emilio, Josemi y Paco provoca que el trío se dedique a hacer bromas pesadas a los vecinos en el interior de los pasillos del portal, colocando carteles con frases como “Vamos a morir todos”, cambiando las cosas de sitio, poniendo un hilo de pescar en el carro de la compra de Vicenta para que parezca que se mueve solo, e incluso subiendo una muñeca del contenedor de la basura a la casa de los Cuesta.
Pero el colofón de todo llegará nada más irrumpir la nieta de Concha, a quien nadie conoce debido a que no reside en el portal, para pasar el mes que le corresponde con su padre divorciado. La niña, debido a su carácter complicado, inconformista y consentido, acaba intentando marcharse de casa en varias ocasiones, además de ponerse a gritar en medio de la noche. En ese clima terrorífico, los vecinos la confunden con el fantasma de la niña del ático, algo que consigue aterrar a todo el vecindario, especialmente a Paco, ya que él no había contratado a la niña como extra en el corto de terror que había realizado.
Finalmente, se acabará descubriendo que todo era una auténtica farsa, al comprobar que la niña no es otra que la nieta de Concha y que el propio Paco, tras averiguarlo, la delatará. Esta situación provocará que todos culpen al dueño del videoclub sin saber que Emilio y Josemi también están detrás del complot. Sin duda, un capítulo muy recomendable para ver en estas fechas tan apropiadas. ¡Feliz puente de Todos los Santos a todos!
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