República versus Covid

Este viernes se llevó a cabo el acto de entrega de despachos de la nueva promoción de jueces celebrado en Barcelona. Al Jefe del Estado le fue vetada la asistencia. No entraré en los motivos que llevaron al Ejecutivo a decidir la procedencia de la inasistencia de Felipe VI, pero sí que me gustaría considerar las diferentes reacciones.

Por lo visto, ante esta inasistencia, Carlos Lesmes, actual presidente del Tribunal Supremo, señaló en el acto que el Jefe del Estado le había telefoneado para informarle de que le hubiera gustado asistir. Sin más.

Hecho que a mi entender es más que obvio. ¿Os imagináis que a un acto que lleva asistiendo durante años, ni siquiera hubiera llamado para mostrar su apoyo al acto? ¿Qué Jefe de Estado tendríamos?

A consecuencia de estas palabras, el partido político “Podemos”, consideró que el actual Jefe del Estado había atacado la neutralidad del Poder Judicial.

Pues bien, estas declaraciones del partido de Pablo Iglesias, como no podía ser de otra manera, han provocado un enorme revuelo, plasmado en la red social por excelencia en donde la gente despotrica de todo y todos, ingredientes fundamentales para dar rienda suelta al populismo.

Y empieza otra vez el partido entre los que apoyan la Monarquía y entre los que defienden una República. Por supuesto, tampoco han faltado los “Viva el Rey”, en muestra de apoyo al monarca, pero, utilizado por unos cuantos como modo de crispar más a los republicanos.

Llegados a este punto me planteo muchas cosas, entre ellas, el cómo hemos llegado a ser la sociedad que somos, que nos alteramos por una institución que no nos influye para nuestro futuro. ¿Seremos moscas? Ya sabéis por que se sienten atraídas estas.

Y no me refiero a aquellos que defienden a la Monarquía como institución legal, y por tanto, respetable. No debemos olvidarnos de que son las leyes las que representan la voluntad popular en una democracia, en cuya cúspide se encuentra la Constitución, y esta deja claro la forma política del Estado Español, en su artículo 1.3. Como tal debe ser respetado.

Tampoco me refiero a aquellos que consideran, (en la que me incluyo) que, en la actualidad, una Republica sería más acorde a la mentalidad social en la que vivimos hoy, en la que la igualdad debe regir para todo, y todos, siendo (o por lo menos debiendo ser) maduros y responsables para elegir a nuestro Jefe del Estado. En otro sentido, considero, la monarquía a día de hoy es anacrónica. Esto no quiere decir que hoy por hoy sea una institución errónea. Pero, como ya he indicado en otros artículos, el miedo al cambio no nos debe frenar a la hora de progresar. Igualmente, no por ello debes perder el respeto a la legalidad, y por tanto, a la Monarquía y el Rey Felipe VI.

Me refiero a aquellos que emplean este tema para causar polémica y crispar. Al “cuñao” que lo único que hace es meter baza en las cenas familiares, creyéndose que lo sabe todo y tratando de imponer su modo de ver las cosas.

Esta polémica, avivada por los extremos, no nos puede hacer caer más bajo. En esta ocasión ha sido la extrema izquierda la que le ha tocado salir al ruedo, (algún día esta expresión será solo eso), moviendo en el tablero su reina, para provocar en los objetores una alteración de su estrategia de juego, hiriendo sus sentimientos. Y dicho así, podéis vislumbrar las “maravillosas” opiniones que merece a la gente unos y otros, perdiendo total respeto por las personas.

Y no es que sea la primera vez, al fin y al cabo, es una bandera que lleva la extrema izquierda (la imposición de la Republica). Digo imposición, porque la forma del Estado, creo, es algo que debe decidir el conjunto de la ciudadanía, sin permitir que un partido político te califique por tu idea de forma política.

Pero esta vez es especial, porque esta polémica llega en un momento en el que los ciudadanos tenemos miedo. Sí, miedo.

Ahora mismo, no nos preocupa la forma que va a tener el Estado o que debería tener, sino las medidas que se están tomando para que no haya más muertos, para que no caigamos más en una crisis que nos va a devorar, para que podamos ver a nuestros familiares y amigos…

Este gobierno cada vez demuestra más insensatez, a manos de su vicepresidente y algún que otro ministro. Mientras, los ciudadanos que mejor estamos, llevamos a cuestas una ansiedad tremenda. Y no provocada por la pandemia mundial en sí, sino por la inseguridad y la incertidumbre que provoca tener un Gobierno en el que parte del mismo se preocupa más de calificar una llamada del Rey al máximo representante del Tribunal Supremo, para poder meter su temita, que por establecer un buen sistema que nos permita saber que vamos a salir de esta.

Cuando tienes mucho trabajo, debes organizarte. Mi sistema es clasificar entre lo importante y lo urgente. Evidentemente, si hay algo importante y urgente, eso va primero. Después tendrás que ir compensando entre lo importante y lo urgente.

Sin duda, el debate Monarquía VS República es un tema importante, pero no urgente. Y sin duda, estamos viviendo un momento importante y urgente con la pandemia.

¿De verdad, a día de hoy, vamos a tener que seguir viendo estas polémicas creadas de forma tan bochornosa?

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