Las negociaciones entre Sumar y Podemos han sido el tema de actualidad de la semana en todos los noticiarios. Finalmente, Yolanda Díaz ha resistido a la presión de la cúpula podemita y ha excluido, sin ningún tipo de miramiento, a la ministra de Igualdad Irene Montero. La posibilidad de negociación para mantener la presencia de la ministra en la candidatura para las próximas elecciones del 23 de julio ha quedado finalizada puesto que, este pasado sábado, ha firmado el acuerdo con el que se ha registrado la coalición entre ambas formaciones políticas.
Las declaraciones entre los miembros de Podemos ha dejado patente el desacuerdo por no contar con la presencia de Irene Montero en las listas, empezando por la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, que, a través de una carta que envió a más de 50.000 militantes vía consulta sobre los acuerdos con sumar, indicó de manera taxativa que “no aceptaría vetos contra la ministra de Igualdad”, a pesar de que ya es algo inviable porque el pacto con la formación de Yolanda Díaz ya se firmó.
Lo que sí sabemos es que Ione Belarra ocupa el puesto número 5 en la lista de Sumar por Madrid, encontrándose después de Iñigo Errejón. Parece que estaba muy preocupada por su compañera de escaño en el Congreso de los Diputados, pero la Secretaria General ha salvado su papeleta… y nunca mejor dicho.
Lilith Verstrynge es otra que también se ha pronunciado sobre el veto a Irene Montero indicando que se trata de un “error político de manual”, al mismo tiempo que la considera como una de las impulsoras del avance feminista. Pero, al igual que Belarra, Lilith también ocupará el cuarto puesto por la circunscripción de Barcelona. Lo que viene siendo un sálvese quien pueda.
Y, cómo no, no podían faltar las declaraciones de Pablo Iglesias en las que también instaba a Yolanda Díaz a que entrase en razón, además de asegurar que no es consciente del error político que comete al descartar a su compañera de Consejo de Ministros, incluso que de esta decisión saldría más fortalecida por no incluirla en la candidatura. Además, el exsecretario de Podemos manifestaba que esta decisión se trata de un absoluto desprecio a los morados.
Pero no solo es Irene Montero la que se queda fuera del barco de Sumar, también la Secretaria de Estado de Igualdad, Ángela Rodríguez ‘Pam’, la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Vicky Rosell, y el portavoz de Unidas Podemos en el Congreso de los Diputados, Pablo Echenique, serán otros tantos que no repetirán legislatura. Este último también emitió un comunicado por redes sociales dejando claro que se ha tratado de un “veto indirecto”, ya que no le han posicionado el número uno por Zaragoza.
Muchas han sido las sorpresas que nos ha dado la Vicepresidenta Segunda del Gobierno al no querer contar con pesos pesados del grupo morado, pero finalmente, a pesar de las presiones recibidas, la formación podemita ha presentado ante la Junta Electoral Central la coalición de partidos que formarán los de Sumar entre los que están: Podemos, Catalunya en comú, Más País, Izquierda Unida, Chunta Aragonesista, Compromís, Més per Menorca, Alianza Verde, Verdes Equo, Proyecto Drago, Batzarre, Iniciativa del Pueblo Andaluz e Izquierda Asturiana.
Un batiburrillo de Barrio Sésamo de los que tanto le gustan a Díaz. Una fiesta de cumpleaños en la que parece que no faltarán las sorpresas. Pero, desde luego, que la que más ha quedado conmocionada y perjudicada ante las negociaciones es Irene Montero dado que ahora se encuentra en un limbo que parece no tener retorno. A la ministra de Igualdad le ha pasado factura su fiasco de Ley ‘Sólo sí es sí’ en la cual recordemos que se encuentran más de 1000 rebajas de condenas además de más de 100 excarcelados por agresiones sexuales, desde la aplicación de la misma… más todas las revisiones que quedan aún por adjudicar
El partido liderado por Yolanda Díaz, en vez de Sumar, lo podríamos llamar ‘Restar’, porque ha realizado una limpieza general en la que ha restado a muchos morados que se creían con la total seguridad de que permanecerían otra legislatura más en los sillones del Congreso de los Diputados. Lo que no se sabe es si, llegado el 23 de julio con tanta mescolanza entre distintas formaciones, será la misma Díaz la que también pase a las filas de restar como algunas de sus antiguas amigas de ‘chupipandi’ en la cámara.
Se acabó la fiesta de Podemos