En la terreta

El trabajo que desarrolla y mantiene Vox en la Comunidad Valenciana es una labor que bien merece unas letras. Enfrentarse todos los días al rodillo progresista que echa por tierra cualquier valoración que no sea la suya propia es un encomendamiento que nuestros votantes y simpatizantes nos hacen a pie de calle, muchos de ellos desde nuestras mesas informativas. Estamos aquí para atenderles y llevar su voz hasta donde sea necesario para que se les escuche.

Hace escasos días, David García, nuestro diputado en Cortes Valencianas, presentó una PNL para prevenir los suicidios en nuestra Comunidad, ya que los números obtenidos nos dan cifras muy alarmantes por encima de la tasa del resto de España. Además, el 75% de dicha tasa, son hombres. Un tema muy importante para tener en cuenta. Pues bien, al Gobierno de Ximo Puig, poco o nada le ha importado estos hechos, ha tumbado esta propuesta porque los muertos solo importan si siguen su ideología y, por tanto, los prefieren ocultar. Esto es gravísimo. Hablamos de que en la Comunidad Valenciana fallece por esta causa una persona al día, que es lo mismo que decir que fallecen ochenta veces más por este motivo que por violencia de género. Y al Consell no le importa. Y por eso, lo esconden bajo la alfombra de manera ruin y lamentable como ya hicieron antes con los fallecidos por el Covid. ¿Os parece que se preocupan por la realidad de los que fallecen en la Comunidad Valenciana? A mí, no. Se preocupan por ellos y sus datos propagandísticos.

Cuando al conseller de economía, Vicent Soler, nuestra Portavoz, Ana Vega, le pregunta por los datos del paro, ¿saben qué hace? Se ríe. Las colas del hambre están repletas, pero Vicent Soler es feliz en su sillón. ¿Qué nombre le ponemos a esto? Mencionar quiero también la actitud de Rubén Martínez Dalmau de la formación política de Podemos, quien, durante la sesión de control de hace dos semanas, se negó a contestar a nuestro diputado Miguel Pascual cuando este le interrogó por la situación actual en que se encuentra el parque público de la vivienda. Al negar los datos requeridos, negó al Parlamento su función de control al Ejecutivo haciendo imposible dicha función necesaria y democrática. Aquí vemos otro hecho gravísimo que atenta contra el desempeño de cualquier tarea en democracia del trabajo de Vox. Pero el asunto no acabó ahí, al señor Martínez Dalmau no le bastó con esto. Todavía tuvo a bien retratar a la formación de Vox como lacayos de Goebbels y franquistas al mismo tiempo, haciendo gala de una gran ignorancia a la vez de un odio exacerbado que durante el ejercicio de su responsabilidad es totalmente inadecuado, fuera de lugar, y, que incita a que otros le tomen como modelo a seguir. Penoso es el nivel que en Las Cortes Valencianas demuestran algunos que no están por la labor de trabajar. ¿Pondrás tu voto en la mano de aquel que se dedica a representarte lleno de odio y mentiras? ¿O preferirás como cada vez más gente, a aquellos que de verdad trabajan por ti? 

En la Comunidad Valenciana hay mucho trabajo que hacer. Los diputados de Vox pelean duro y son conscientes todos ellos del camino que tienen por delante. Sabíamos que no iba a ser fácil, pero ellos, los del Consell, están peor acomodados ahora que antes de aparecer Vox y seguirán así en cada día que pase. Sus respuestas llegarán tarde o temprano porque es la única alternativa que tienen a las preguntas que les hacemos, que no son otras, que las que vosotros mismos queréis saber. Y solo a eso estamos. Muchas gracias por todo, españoles de bien. 

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