Entran los pollos/as al corral del plató de MasterChef Celebrity alegres y cacareando. ¡Da gusto ver tanta ilusión y algarabía! Los participantes se encuentran en el ecuador del programa y, a estas alturas, puede verse muy claramente quién sabe, quién aprendió, quién depende del día, quién no hay manera y… ¡Toñi Moreno! La presentadora malagueña eclosionó, ya le pueden dar las llaves de la ciudad o ponerle su nombre a una calle, por favor.
Llega la primera prueba, la verdad que se trata de una prueba muy divertida. Cada concursante tenía que hacer una llamada que lo conectaba con “alguien”. Ese “alguien” le diría el plato a cocinar y la receta. Pero ¿Tan fácil? Pues va a ser que no.
Los “alguien” eran para ser exactos tres: Xavier Deltell, Leo Harlem y Juan Dávila, tres humoristas. Ya os podéis imaginar que la receta clara, lo que se dice clara, no se la dijeron. Ahí se tuvieron que apañar con anguilas, lengua de vaca, chipirones, suflé y algún proyecto de coulant. Salvo Toñi y Jorge Sanz, los demás, incomible; raro, regular… Jesulín y su suflé se quedó en subida de bilirrubina. El coulant de Escassi era literalmente una pedrada. La ganadora indiscutible, Toñi; su plato de angula al estilo nipón no se incluirá en el menú del Restaurante MasterChef, que era el premio… además de otras prebendas para la prueba de exteriores.
Y nos marchamos a los exteriores. Para ser exactos, al Puy Du Fou ubicado en Toledo. ¿Qué es eso? Un parque temático histórico. No hay Dragon Ball, ni montañas rusas, sino un enclave hecho como réplica a un pueblo medieval que recrea espectáculos de diferentes épocas. La sorpresa fue que aparecieron los seis expulsados… todo apuntaba a que en ese mismo día se celebraría también La Repesca.
Toñi, como ganadora de la primera prueba, tiene la ventaja de elegir los platos a cocinar y también los miembros de su equipo del tirón. Elige a todas las chicas…. Y a César Cadaval, el equipo rojo. Otra de las ventajas fue poder elegir el capitán del otro equipo, a Jesús Janeiro le tocó la china, por haberse reído la semana pasada de la capitanía tan nefasta de la presentadora. El equipo azul, tras la decisión de Toñi, quedaría formado exclusivamente por chicos. Esto pone nervioso a Eduardo Casanova, tanto que dijo que habría en el equipo demasiada testosterona… pero, ¿qué no pone nervioso a Eduardo?
El chef invitado como autor de los platos fue Carlos Maldonado, exganador del concurso que hizo negocio con todo lo aprendido. El equipo rojo cocinó pisto con huevo y arroz con conejo. Otra vez lomos, esta vez de truchas como salmones de grandes y de nuevo se produce el “apaleado” del pobre pescado. Da igual a quién le toque, vaya inquina la que perpetran contra los pobres peces.
Los conejos venían con su piel, pelo… mucho pelo. Toñi se encargó de pelarlos y me da que después los cambiaron por conejos limpios del Supermercado El Corte Inglés, porque al quitarles la piel se quedaban todos con pelillos pegados como barba de dos días y, de repente, estaban como los que yo compro en Mercadona, inmaculados. Para los que optaban a la repesca dejaron el postre.
El equipo que resultó ganador de la prueba fue el Rojo, el de Toñi. La presentadora fue la destacada con sobresaliente, tanto es así que eclosionó a lo bestia, consiguió llevarse los 4000 euros para la ONG. Por su parte, el equipo azul fue un poquito desastroso, ya que se quedaron cortos en las cantidades y el guiso de la trucha. Además, de no ser la receta pedida, aunque estaba bueno… se trataba de un escabeche de trucha despedazada.
Jesús, antes de ser valorado, acaba reconociendo que no estuvo bien, que la capitanía resulta difícil y que le vino grande. Sinceramente, yo no aceptaría una invitación de Jesus para comer algo que él haya preparado, pero me gusta demasiado la honestidad que maneja y su sinceridad para todo… aunque a veces sea un ‘sincericidio’ que le perjudique ante tanto angelito empático que abunda en los concursos. La repesca la acabaría ganando Miguel, el actor de novelas españolas, que prometió raparse la cabeza en caso de ganar… y cumplió.
Jesulín, Eduardo, Escassi, Jorge Sanz y Dani ‘El Influencer’ van a la prueba de expulsión. Para ello, dispusieron un montón de ingredientes en una mesa. Cada concursante tenía que elegir cuatro para preparar un plato libre. Así hasta que quedasen tres de ellos. Aparte de los cuatro ingredientes, cada miembro contaba con la posibilidad de añadir una dotación de ingredientes básicos.
Los del programa invitan a dos chefs que regentan un restaurante de dos soles Michelín, dos modernos de cejas perfectamente delineadas embutidos en pantalones pitillo. De la primera eliminatoria se salva Jesús. Lo llamativo fue el estrepitoso fracaso de dos favoritos: Jorge Sanz y Álvaro Muñoz Escassi. De la segunda se salvaría Eduardo. Escassi y Sanz continuarían con su fracaso en los fogones y junto a Dani se acaban enfrentando ya a la expulsión.
Dani sería quien saliera victorioso de la batalla, gracias a unas almejas a la marinera acompañadas de yuca, a modo de patatas fritas, esas fueron su salvación, pero exclusivamente por haber fallado el resto en la prueba, media docenas de almejas… muy mal se te tiene que dar la marinera. Pepe, uno de los jueces le dice “Has replicado a los mejillones belgas que los sirven con patatas fritas”. Belgas, de Bélgica… el chico se quedó como vaca mirando al tren. ¡Qué va a saber este niño lo de los mejillones belgas! Cogió yuca y almejas… ¡Y no sabía ni tan siquiera lo que hacer con la yuca!
Pepe, un poquito de por favor o disimulo, este chico seguramente no pasará de saber hacerse un sándwich mixto. Total, entre Jorge y Escassi largaron a Jorge Sanz, quien cometió muchos errores desde el principio… pero sabe cocinar. De Dani no sacaréis más que un like que os dé en Instagram, de lo que vive; muy majo, muy guapo, muy bueno y tal y tal, nada más. Aquí no habrá eclosión culinaria ni yendo de rodillas a Lourdes. Hasta más ver, amigos/as de Minuto Cotilla.
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